LO MÁS VISTO
Llega el dulce más delicioso de la Navidad: el roscón de reyes relleno con nata sin lactosa. Una mezcla de esponjoso bizcocho y cremosa nata sin lactosa; todo decorado con almendras y fruta escarchada. Esta delicia no falta nunca el 6 de enero, el día de los Reyes Magos. Y como no va a ser menos, os ofrecemos un pequeño, aunque apetitoso regalo: la receta perfecta del roscón de reyes relleno con nata con un ingrediente secreto: nata Kaiku Sin Lactosa. Pocos placeres como el de hornear un roscón en casa. Disfruta de este día como se merece: con un buen pedacito de roscón y cero remordimientos.
Quizás te pueda interesar: Plan detox con 5 trucos contra los excesos de la Navidad
Aunque a nadie le gusta pasar las Navidades con la calculadora en la mano, saber cuántas calorías tiene un trozo de roscón con nata puede ayudarte a compensar. Esta receta no es especialmente ligera, pero siempre varía si el roscón lo preparas tú mismo. De media, un trozo de roscón tiene 250 calorías, pero puede llegar hasta las 350 calorías por 100 gramos.
Tipo de cocina: Navidad
Tiempo de preparación: 2h y 30 minutos
Tiempo de cocción: 15-20 minutos
Personas: 6 personas (¡o las que quieras!)
Disolver la levadura en la leche tibia (calentita pero no mucho) con la punta de los dedos. Reservar.
En un bol grande de batidora eléctrica mezclar los 320 g de harina con la ralladura de naranja y el azúcar, y mezclar. Hacer un hueco en el centro y añadir la levadura con la leche, el ron, el agua de azahar, el huevo y la sal. Con el accesorio de amasado mezclar durante 5 minutos a velocidad media. Si no tenemos batidora eléctrica, entonces amasar a mano durante 10 minutos. No hay que añadir más harina, solo ir amasando para que deje de estar tan pegajosa. Podemos amasar 5 minutos, parar 5 minutos y retomar el amasado por otros 5 minutos. Será más fácil porque el reposado hará que la masa se pegue menos. ¡Repostería clásica donde las haya!
Enharinamos la encimera y colocamos la masa metiendo la parte inferior de la masa hacia adentro redondeando la masa. Hay que formar una bola.
En un bol limpio embadurnado en un poco de aceite, colocamos la bola y tapamos con un trapo. Lo mejor es calentar el horno a 50 grados durante 5 minutos. Apagamos el horno y metemos el bol con la masa tapado con un trapo húmedo. Cerramos el horno (¡apagado!) y dejamos reposar hasta que triplique su volumen aproximadamente 1 hora y media (si no hemos encendido el horno entonces tardará alrededor de 2 horas)
Cuando la masa haya crecido suficiente es el momento de darle forma. Antes que nada debemos tener preparada una bandeja con papel de hornear encima. A continuación sacamos la masa del bol y la amasamos 1 minuto para sacarle el aire suavemente. Dejamos reposar 1 minuto y le damos forma de rosca: formamos una bola y le hacemos un agujero en el centro colocando un aro de emplatar para que el agujero no se nos cierre (si no tenemos aro no pasa nada, el agujero se cerrará un poco pero no afectará lo rico que estará). Reposar en el horno apagado durante 50 minutos.
Una vez completamente frío, montar la nata hasta que empiece a estar semi dura. Entonces le añadimos las cinco cucharadas de azúcar y la vainilla y continuamos batiendo hasta que quede bien firme.
Precalentar el horno a 180 grados. Pincelar el roscón con huevo batido y decorar con las almendras picadas, el azúcar y las frutas escarchadas. Hornear durante 15 – 20 minutos. Dejar enriar completamente sobre una rejilla.
Lo cortamos en dos mitades con una cuchillo panadero de sierra y rellenamos de nata con manga pastelera, sin olvidar esconder una haba y una figurita.
Si has hecho más de la cuenta, congelar el roscón no es difícil. Hay varias opciones, pero si aun estás a tiempo, lo mejor es congelar la masa sobrante tras el primer levado. Esto hará que la masa se detenga pero se conserve a la perfección para la siguiente vez. Cuando quieras rescatarla del congelador, tendrás que tener paciencia. La masa congelada debe descongelarse a temperatura ambiente y luego, conforme se vaya calentando, se activarán de nuevo las levaduras.
También puedes hornear el roscón y dejarlo casi listo para la mañana del día 6. ¿Cómo congelar el roscón? Hornea la rueda, haz ya el corte a la mitad para rellenar y envuelve el roscón en papel film. Mételo al congelador y sácalo un día antes de consumirlo a la nevera. Lo ideal es rellenarlo con la nata una vez esté descongelado y terminar de decorar con azúcar y almendra picada.
¡Feliz día de Reyes!